Todos los jóvenes que formamos la asociación trabajamos como voluntarios, prestando nuestro tiempo y esfuerzo de forma desinteresada, sin compensación económica alguna, ya que consideramos que el mejor pago que se puede recibir es la sonrisa de un niño.
Con esta premisa por bandera llevamos a cabo todas nuestras actividades y esta motivación ayuda en gran parte a que el ambiente dentro de la asociación sea inmejorable, tanto en la relación entre monitores como con los propios niños.
Si eres una persona comprometida, a la que le gustan los niños y estás deseando ayudar a los demás, no lo dudes, ¡ponte en contacto con nosotros!